lunes, junio 19, 2006

Ensimismamiento

Para no hablar de esa droga terrible, nosotros mismos, que tomamos en la soledad.

Walter Benjamin

14 comentarios:

Silvia Sue dijo...

Ay...

Carlos dijo...

mi sueño es tomarme licuado.

(me pone cosas de B. y automáticamente pienso en Ud., en la ventana de La Paz, en los cajones apilados al lado del camión y en el otro B.)

Vero dijo...

¿Ma per che Ay, Silvia Sue? Si no dolió... Pasa que ayer, día gris, frío y acuoso, estuve sola casi todo el día, y no hice casi nada más que leer y escribir (empecé 2666, de Bolaño, que me llevó a unos poemas de Borges, después al cuento "La casa de Asterión", del mismísimo; más tarde me fui con Benjamin, después volví a 2666). Me sentía tan contenta en mi cáscara de nuez. La frase iba perfecto con ese estado.
¡Ja! Mirá que só loco, Carlos. Y sí, diste justo en el clavo, viene por ahí este B., estaba buscando algo de Dirección Única, algo que le comenté a B., que no encontré, pero en el camino me entretuve con tanta belleza que ni te cuento.

Bardamu dijo...

Ese camino (Bolaño... Borges... Benjamin... -todos B.-) es una posible e insoslayable navegación para un día así. Hiciste lo imprescindible (lo necesario: navegar).
Benjamin, ensimismado del otro lado de la ventana del bar, gesto adusto, copiando en minúsculas fichas de cartulina frases para su trabajo interminable. Así, tal como lo muestra una foto, en la biblioteca de Paris (¿o era el bar, la ventana, una mesa con una dirección abierta?)

Silvia Sue dijo...

Sí que me dolió, Vero. Yo estuve sola también perono sé por qué ayer con muy poca capacidad para estarlo. A ver si todavía me digo cosas de las que no me quiero enterar.

Anónimo dijo...

Prima borrose todo. Qué pachooo?

Vero dijo...

¡Ah, sí, primis, yo también vi el eclipse de blog! Qué habrá sido. Ahora todo volvió a la anormalidad habitual, parece.
SS, debe ser por eso que B. habla de droga "terrible", porque a veces pega mal.
B., sí, fue un paseo, arduo, por textos de goce, diría otro B. Gracias. Yéndome de tema: hoy pasé por Losada. En la vidriera estaba El Libro de los Pasajes, ¡a 396 mangos! Ay, diría otra B. (la Beltrán).
Besos a todos.

Carlos dijo...

lo compramo, Vero, lo compramo, que para eso uno labura. O si no lo robamo, hay que ver qué dice B. Quiero decir, yo pregunta... ¿cualquier libro se puede robar?¿es más pecado robar un libro que otro? Yo no sé por qué cada vez que pienso en robar pienso en Prigogine, siempre digo lo mismo, porque son caros, porque son de Tusquets. Ahora dudo. Voy a pasar por Losada, voy a ver. Si me ve pasar corriendo por la ventana de La Paz es una película y además yo no soy.

Vero dijo...

¡Jua jua! Pero no, si es obceno ese precio, vergüenza debería darles. Lo de robar, bueno, soy tan gila para el afano, tendría que buscarme más bien una tarea de distracción, puedo hacer sombras chinescas que me salen bárbaro o disfrazarme de saltimbanqui y hacer contorsiones mientras usté hace mutis por el foro con el libro encanutado. Y según alguna gente los libros deberían ser robados. Un beso.

Carlos dijo...

Es suficiente con que si me ve pasar con el mamotreto bajo la axila no testifique en mi contra. Usted no vio nada, dígales.

Vero dijo...

Corrijo: no es obceno, es oxseno u opceno, que de las dos maneras puede y debe decirse. ¡Jua jua! Qué obscena bestia.

Bardamu dijo...

Lo robaria sin escrúpulos si encontrara la manera en Losada o en cualquier librería... no lo dude.
Pero haré algo mas sencillo: impulsare su compra por la biblioteca del Goethe Institut, y luego me lo fotocopio...
Rebusques, en la era de la comunicación mercantil.
Saludos.

Carlos dijo...

ahí va un hombre de recursos, Vero; y ahí va otro CON recursos, fíjese, por Corrientes, por la ventana indiscreta de La Paz.

inx dijo...

Miren, no es que yo ande por ahí delatando ladrones de libros. Ocurre que ya no hay códigos y ahora se roba sólo para la reventa, sin intención de leer. También me parece admirable juntar mango a mango para gastárselo en un libro de Benjamin, me parece un lujo de ésos que uno se merece, como para otros será el champagne o lo que signifique un gasto de esos que remiten al consabido "los gustos, en vida". Absurdo, en cambio, me resultaría invertir 5 pesos en algún mercader miserable que alguna vez se haya puesto de moda leer. A esos, ni la justicia de la mesa de saldos. Y si se lo van a afanar, vayan a Losada, nomás, no me comprometan.