viernes, abril 28, 2006

Primeras letras

Mi primera clase en la facultad me la acuerdo patente. Fue en el aula 218 de Puán, con Jorge Panesi. Éramos como 300 personas o más. La primera clase de la primera materia que hay que hacer en Letras: Teoría y Análisis Literario. El tipo se desplazaba sobre el piso de madera -sí, como si estuviese en un escenario-, de acá para allá, gesticulaba, movía los brazos, muy histriónico. Dijo: “Los negros no tienen historia”. Dijo: “Una hélice de un avión no es nada, pero sí si es la hélice del avión que lleva a Mussolini para encontrarse con el Führer”. Eran citas de otros, pero no importa, para mí son citas suyas. Dijo: “Voilà”, cuando alguien se animó a responderle una pregunta, e hizo una reverencia. Habló de mil libros en dos horas. Yo estaba, cómo decirlo, fascinada por este hombre que sabía tanto de lo que yo quería saber y agotada por tanta información nueva, pero mientras trataba de procesar algo de todo lo que estaba pasando pensé: “Qué suerte que al final elegí esta carrera”.

20 comentarios:

Carlos dijo...

Ahora, ese Panesi, yo digo, ¿sabrá algo de diálogos amorosos, después de haber leído dos mil?¿o se sabe lo mismo que antes de empezar a decir "voilà"?

Anónimo dijo...

Mirá vos, acá la primera materia me acuerdo que se llamaba "Historia Social de la Literatura y el Arte".
Y después estaba una parecida a la que vos decís, que se llamaba Teoría gramatical y Aplicación Práctica I,
Y la II, que se daba en segundo año.
A Historia Social...la daba Ricardo Ahumada, juntaba los dedos parado en la puerta antes de entrar para meditar un minuto, con la mirada perdida, mientras nosotros (25 mujeres y cuatro gays)lo mirábamos estupefactos.
Fue todo el año, todos los díaas, con la misma corbata. Después nos enteramos que hacía quince años que usaba la misma, se cambiaba las camisas pero la corbata no.
Roja, pintitas azules, nunca la voy a olvidar.

Anónimo dijo...

El primer teórico de la primera materia en mi carrera fue Comunicación I y la daba entonces Sergio Caletti. Esa misma sensación de admiración ante un tipo que sabía tanto, que usaba ese foro privilegiado para desplegar su ego y sentirse admirado. Jamás olvidaré sus latiguillos favoritos: "a todos los fines prácticos" y "hacer sentido". Con él aprendí a que el punto no era la "comunicación" sino "la construcción social del sentido" y a adoptar hacia eso una mirada no esencialista...

(PS: ah, sí, soy uno de "esos" que pasaron por una Facultad de Comunicación)

(PS2: Silvia, ¿dónde es "acá"?)

Anónimo dijo...

Pablo, acá es donde vivo, en la ciudad de Santa Fé.
Hace años de lo que estoy diciendo, ahora Letras se estudia en la Facultad de Formación Docente, depende de la U.N.L.
Antes se llamaba Escuela Universitaria del Profesorado.

Anónimo dijo...

bueno, mi primer materia fue "psicologia experimental I", donde vino una gorda con PHD in Skinner, que nos puso un ratito blanco en la mano y nos dijo: hay que hacer nel el condicionamiento tal y bla, bla, bla, encuanto el ratito se metia por entre nuestros dedos y manos. Mi primer materia en universidad casi me mata de asco...

Anónimo dijo...

¿Un ratoncito, Maray?
Uajjj.

Anónimo dijo...

Mi primer materia en la universidad fué "Pensamiento Científico" y la profesora lucía unas calzas tejidas que le hacían un culo deforme, de unos setenta años de deformidad. Esto marcaría mi pensamiento científico para siempre, definiendo primordialmente un campo:
las sandalias de agosto de "la testigo de Jehová", el mameluco de Manliba de la Ulanosky, el pucho torcido de la Ledesma, es decir, todo indumento que me permitiera reír un buen rato hasta la hora de salida.

Anónimo dijo...

Y la flaca Strina, adjunta de Derecho de la Navegación, con las medias eterna, pero eternísimamente corridas. Venía con las pieles y en su regio coche, pero las medias...no había nada que hacerle.
Siempre había una irónica que le decía:"Dra., disculpe, pero fíjese que se le corrió la media". Y la Strina ponía cara de sorprendida:
"No puede ser! Debió ser recién, nomás..."
Situación que se repetía todas las veces que nos tocaba con ella, y era impagable la carita que ponía. Las cejas en arco y la boca en O.
La conclusión que sacábamos era que tenía pocos pares, y que ella se los ponía con el agujero.
Y decíamos pocos pares y no uno solo porque le teníamos fichadas las tonalidades: ámbar, negro, etcétera, y la ubicación de la rotura...casi siempre pantorrilla atrás.
Qué lindo el Derecho Marítimo y cómo aprendíamos.

Vero dijo...

Jua jua! Me hacen reir, che. ¡Ah, la puta que vale la pena tener un blog! (Maray no va a cazar una).

Tino Hargén dijo...

Bueno, mi primer clase fue un la Facuta de Arquitectura de Rosario, 1979, videla process greenwich time. Un tal Arq. Serra, mediana edad, Opus Dei friendly, nos habló sobre la forma de estidar en la universidad, ya ni me acuerdo....

Famosa era la jefa de catedra de Historia de la Arquitectura Hebe Bragagnolo, una mina que sabia un pilón, daba una clases de primera y se fumaba 20 puchos Se rumoreaba que antes del 76 su presentacion a los alumnos era " soy puta, atea y comunista", claro que ya habia morigerado su discurso..que epocas !!!!!!!!!!!!! Nuestra facultad tenia un pasillo semibaierto de mas de casi 100 metos de largo, teniamos un cana camoiflado de los servicios cada 33 metros che....todo bajo control.

Anónimo dijo...

Opus Dei friendly... que CapoTino.
la Strina la tenía clara, SS. "Caminando rápido no se ve"...

Vero dijo...

Recién hoy domingo leo los comentarios sin correr, cuando ya nadie va a leer esto porque envejeció, pero bueno. Yo ya avisé que era desastrosa, así que saben a qué atenerse (poah, cómo suena esta frase, amenazante, ¿no?, ¡jua jua!).
Carlos, lo que decís me hace acordar de que cuando leímos "La lección del maestro", de Henry James, Panesi dijo que el personaje principal suplantaba la vida amorosa por la literatura (o más o menos así, fus hace 15 años). ¿Puede ser que a Panesi le pase lo mismo, decís vos? Pero no creo que deba ser así necesariamente. Quizás no te entendí. Repítame la pregunta, profesor.
Mirá vos, Silvia Sue, el tipo se mata explicando y vos historizándole socialmente la corbata. Aunque lo de hacerse el yogui en la clase es para llamar la atención, no jodamos. En cuanto a lo que decís de Formación Docente, en la UBA podés ser Licenciado o Profesor, o las dos cosas. Yo hice sólo la licenciatura porque cuando empecé Didáctica General las profes hablaban como las de Utilísima. Salí rajando. Igual me arrepiento porque eran materias fáciles, debería haber tenido más paciencia. La Strina, y bueh, por ahí tenía fetichicmo con las medias corridas, hay para todo.
Pablo, como siempre, gracias por acompañar en el sentimiento.
Maray, lo del ratón seguro era una especie de "filtro" para que los alumnos se vayan y queden menos (lo que acá es el CBC), no pueden ser tan asquerosos.
Ayd, claro, primero vino el CBC, con Pensamiento Científico y todo eso (¡Economía te hacen estudiar, los muy idiotas, para Letras!)pero no lo cuento porque no lo disfruté para nada (a la carrera sí).
Tino, lo del Opus Dei: vos sabés que en Letras hay una mina que daba Siglo de Oro Español (Litertura Española II) con kilos de rosarios al cuello, para quien en Cervantes todos los caminos conducían a la Biblia. Yo decía, ¿pero qué hace esta mina acá, en la misma facultad que dan clase Viñas, Sarlo, Link? Locos hay en todos lados. Y lo de los milicos, no sé, acabo de decir que no aguantaba a las de Didáctica porque hablaban como bobas, así que eso supongo que me hubiera llevado a ser autodidacta.
Un beso a todos (uno para cada uno, se entiende).

Suarez dijo...

Lo que más me acuerdo de la primera clase con Panesi es que no me pude sentar. Me quedé parado en el pasillo que da al ventanal del aula 218 y hablando con los que tampoco conseguían asiento. Hablaba con una chica que iba a recursar la materia, me recomendaba prácticos y demás tips. Cuando hicieron el llamado para acercarse a dejar la hoja con datos personales (la bendita inscripción a prácticos), la chica me dijo: chau, me voy al pogo. Nunca más la vi. Y era peor que en un pogo en Cemento, efectivamente.

Anónimo dijo...

Empecé la facultad este año de la mano de Panesi. ¡Qué hombre maravilloso! Ah, y se dice por ahí, cienveces, que también sabe de diálogos amorosos.
Cada vez que tengo quilombos en la UBA recuerdo algunos momentos de completa felicidad (los teóricos de Panesi, la mejor onda de los ayudantes, Muschietti hablando de poesía) y eso compensa todo.

Anónimo dijo...

llega un punto en que queres mandar a panesi y sus volilà a la mierda... que materia plomiza por dios

Vero dijo...

¿Se habrá vuelto plúmbeo con los años, Panesi? Una pena. No fue así para mí.

Julián Negromanti dijo...

Yo cursé con Panesi creo que en el año 2002 o por ahí (fue el año en el que hizo la crítica sobre "las Hortensias" de Felisberto Hernández y de "el juguete rabioso"; no pongo de quien porque ya todos lo deben conocer)el tipo es verdaderamente un capo y da la sensación de que leyó todo. Juro que todos los libros que uno le nombraba ya los había leído (aún los no tan clásicos), además hacía las clases muy amenas y te abría la cabeza para pensar como crítico. Era gracioso. Me gustaría volver a la facultad para cursar la misma materia. Lo mismo con Muschietti: comprendí la poesía contemporánea gracias a ella.

Ana Sofia Castella dijo...

Yo estoy en mi primer mes de la carrea.. tengo teoricos con panesi los martes y jueves a las 7.. es incrible ese hombre.. sabe todo, como dijo el Julian. Me encantan sus clases, pero debo admitir que tengo una sensación de "no se donde estoy" terrible.. ya estoy atrasada con la lectura, y nos manadn MUCHO, amo leer, pero justo este cuatrimestre tengo la cabeza en cualquier lado, ando muy distraida.. cada vez que me doy cuenta de eso me da bronca, porque no quiero desaprovechar los meses que tengo a Panesi de profesor. Mi opinion es que èl debería estar en todos los años de la carrera jaja siento que podriamso seguir aprendiendo de él hasta que la muerte nos separe.. que otros profesores de la carrera los hicieron sentir asi? cuentenme que soy nuevita jaja

magenta22 dijo...

La verdad es que entré a la carrera de letras con mucha desilusión (como la mayoría de los que llegan a Puán porque quieren ser escritores o porque les "pica el bichito" de la literatura y como todos ellos me encontré con una facultad parecida a una oficina pública más interesada en formar grises repetidores de las 3 páginas de un apunte que gente creativa.De Panesi solo recuerdo que jamás me dejó participar en sus clases a pesar de que levantaba la mano seguido jaja(seguramente yo no formaría parte del alumnado sumiso digno del "voilá")

Vero dijo...

Qué pena que hayas tenido una mala experiencia. La mía fue exactamente opuesta, en la forma de encararla y en el resultado. Yo entré sin ninguna ilusión, solamente me interesaba saber más de literatura y me sirvió. Por supuesto, no se puede entrar a Letras pretendiendo que te enseñen a "ser escritor", eso lo sabía y no esperaba nada en ese sentido. Personalmente no creo tampoco que sirvan los talleres. Estoy convencida de que la escritura es algo que se ejercita en soledad. Por lo general las clases teóricas no permiten mucha "participación" del alumnado, eso queda relegado más bien a los prácticos. Una de las buenas cosas de la facultad es que me enseñaron a no ser "sumisa" ni ante los grandes nombres: todo debía ser puesto a prueba, todo repensado. Saludos, magenta.