miércoles, mayo 22, 2013
La dificultad
El otro día, mientras caminábamos
por la calle Honduras, le conté a Sergio que había visto de nuevo Sátántangó.
No sé si conocés, le dije, es
una película húngara, en blanco y negro, de más de siete horas. El
director es
Béla Tarr. ¿De qué trata?, me preguntó. De la miseria de los hombres,
dije, y miré las baldosas. Pero ¿qué pasa? (Hice una pausa para
compactar el argumento
en una línea). Unas personas trabajan en una granja venida a menos,
juntan
plata, y llega alguien, un conocido, que los estafa. ¿Eso nada más? Eso,
básicamente. Bueno, hay una muerte, pero se vuelve funcional al
estafador, es
como… un instrumento para forzar la voluntad de los otros, así que sí,
es más o
menos eso. Ah, dijo. (Acá siguió un silencio oblongo). Yo estoy viendo
otra vez
el Decálogo de Kieslowski, dijo
Sergio al rato.
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