jueves, enero 24, 2013

Dirección

Bioy: "Los mejores recuerdos de la vida, los más emocionados, corresponden a películas".
Borges: "Es claro: los más dramáticos, al menos. Están mejor dirigidos que nuestros recuerdos personales".
Adolfo Bioy Casares, Borges

jueves, enero 17, 2013

Numeral


Por otro lado, creo que esa imagen de los platos apilados página tras página se da por contagio de las palabras que Bloom se dice. Su aguda y a la vez abarcadora mirada -vertical y horizontal, el punto y la ancha banca- es acompañada con frecuencia por una operación de abstracción. Tomo un ejemplo, adrede, numeral. Bloom mira el sol que se oculta, los tranvías que van y vienen. Piensa en Dignam que murió, en Mina Purefoy que está pariendo. En seguida, la imagen del cúmulo de los que nacen y mueren: "Uno nace cada segundo en alguna parte. Otro muere cada segundo. Desde que di de comer a los pájaros, cinco minutos. Trescientos se fueron al otro mundo. Otros trescientos nacidos, lavándolos de sangre, todos son lavados en la sangre del cordero, berreando ¡meeeee!”. (Pasmo. Aplausos.)

sábado, enero 12, 2013

Comedor

"Come en casa Borges", dice Bioy. ¡Cuánto come! Hasta seis veces por página. En un libro de 1.663, veo cómo se alzan enormes pilas de platos, verdaderas pirámides nutricionales para saciar todas esas referencias. La frase sin duda busca reflejar cercanía y cotidianidad, pero la repetición resulta indigesta para el oído.
(No hay o no encontré hasta ahora alusiones al trozado de los alimentos ni a la masticación, ni a otros procesos corporales derivados.)

jueves, enero 10, 2013

Beckett acerca de Finnegans Wake

Aquí la forma es contenido, el contenido es forma. Ustedes alegan que esto no está escrito en inglés. En realidad, no está ni siquiera escrito. No es para leer, o más bien no es sólo para ser leído. Es para ser visto y oído. No es que Mr Joyce escriba sobre algo; su escritura es ese mismo algo. (Cuestión que ha sido comprendida por un eminente novelista e historiador inglés cuya obra es diametralmente opuesta a la suya). Cuando el sentido es el sueño, las palabras se duermen. (Véase el final de Anna Livia). Cuando el sentido es el baile, las palabras también bailan. Consideremos el pasaje con que termina la pastoral de Shaun: “To stir up love’s young fizz I tilt with this bridle’s cup champagne, dimming douce from her peepair of  hide-seeks tight squeezed on my snowybreasted and while my pearlies in their sparkling wisdom are nippling her bubblets I swear (and let you swear) by the bumper round of my poor old snaggletooth’s solidbowel  I ne’er will prove I’m untrue to (theare!) you liking so long as my hole looks. Down”. El lenguaje está borracho. Las mismas palabras se ladean y entran en efervescencia. ¿Cómo podríamos calificar esa vigilancia estética general sin la cual no hay posibilidad de atrapar el sentido que sube constantemente hasta la superficie de la forma y se convierte en la forma misma? San Agustín nos da la pista de una palabra con su “intendere”; Dante escribe: “Donne ch’avete inte-lletto d’amore”, y  “Voi che, intendendo, il terzo ciel movete” pero su “intendere” sugiere una operación estrictamente intelectual. Cuando hoy un italiano dice “Ho inteso”, quiere decir algo entre “Ho udito” y “Ho capito”, entre “escuché” y “entendí”, un arte de intelección sensual y desordenado. Quizá “aprehensión” sea la traducción más adecuada. Stephen le dice a Lynch: “Temporal or spatial, the esthetic image is first luminously apprehended as selfbounded and selfcontained upon the immeasurable background of space or time which is not it […] You apprehend its wholeness”. Aquí hay que aclarar un punto: la belleza del Work in Progress no se presenta tan sólo en el espacio, pues su aprehensión adecuada depende tanto de su visibilidad como de su audibilidad. Hay que aprehender una unidad espacial y otra temporal. Substitúyase “and” por “or” en la cita y se vuelve obvio por qué es tan insuficiente la palabra “leer” en el caso de Work in Progress como sería extravagante “aprehender” para hablar de la obra del difunto Mr Nat Gould. Mr Joyce ha des-sofisticado el lenguaje.

Samuel Beckett, en "Dante... Bruno. Vico... Joyce.", Proust y otros ensayos

viernes, enero 04, 2013

Néstor

Tres citas terribles como los ángeles de Blake, de alas desmesuradas:
“Oigo la ruina de todo espacio, vidrio pulverizado y mampostería en derrumbe, y el tiempo una lívida llama final. ¿Qué nos queda, después?”

“Tengo miedo de esas grandes palabras que nos hacen tan desgraciados”.

“La historia es una pesadilla de la que estoy tratando de despertar”.

Se ensayan explicaciones. El fin de los tiempos de Blake o de una era a causa de la primera guerra -Gamerro. La reacción ante una velada amenaza de Deasy -velada quizá hasta para él mismo-: “somos generosos pero justos”. Una alusión, por último, a la opresión ejercida sobre Irlanda por esos tiempos.

Néstor es el prototipo del anciano prudente, valeroso, excelente en el consejo, tanto en la Ilíada como en la Odisea -Grimal. “He venido a abrazar tus rodillas”, le dice Telémaco a Néstor, cuando acude a él para averiguar el destino del padre. Acá hay un consejero, pero Stephen no se inclina ante él ni a su lado. Este falso sabio enarbola una bandera inglesa: Pagué mi precio. “¿Comprende?” “Por el momento, no” -Stephen. Y Deasy: “sabía que no”. Pero no sabía, no puede saber.  

“¿Es ésta la sabiduría de los viejos?”

Excurso: Una vez escuché que Brausen le insinuaba a Stein que había dos tipos de hombres, los que pagan el precio antes y los que lo hacen después. La mayoría paga antes. Brausen, después.

Deasy paga antes. Stephen, después. ¿Comprendería esto Deasy?

Stephen enseña historia a chicos de rostro vacío. El precio. Y también: “Tía dice que mataste a tu madre”. Este Hamlet, al que ronda el clamoroso fantasma de la madre muerta, ¿sobre quién podrá extender la mortaja de su venganza? La culpa le corroe la conciencia. Una vez más: el precio.

Un puente cruza un río. Y hay muchos puentes sobre el Liffey.

miércoles, enero 02, 2013

Estrella

Thiago Pethit ofrece su último álbum, Estrela Decadente, para descarga gratuita desde su página. Como creo que no es muy conocido por estos pagos -yo lo descubrí en un festival de esos donde uno se juega el disfrute a la perinola-, dejo acá el video de un tema de su disco anterior, Berlim,Texas. Casi cinco minutos de belleza, amable introito para el año novísimo.