miércoles, septiembre 05, 2012

Cuestión de ritmo

Ayer leí la entrevista que Patricio Zunini le hizo a Marcelo Cohen en Eterna Cadencia, donde una vez más se lo oyó hablar del papel esencial del ritmo en la literatura. Hoy venía en el colectivo leyendo Para esta noche, de Onetti, y no podía esperar a llegar a la oficina para leer este párrafo en voz alta:

Tampoco pudo obtener de sí mismo otra cosa que dulzura y apagada tristeza al pensar en Luisa la Caporala, la infinita luz del sol encima del carricoche donde colgaba ella del pescante, muerta, la tosca mano apuntando la reseca huella de barro, el pelo tieso que comunicaba el escondido paso de la sangre desde su cabeza hasta el suelo, y sujetó la imagen para ponerse a pensar furiosamente en Luisa la Caporala muerta, por estar muerta, por cumplir el deber de estirar la mano, él que estaba todavía vivo con su calor, su olor y su respiración en su sombra para sostenerla mientras fuera posible, para no dejarla perderse y morir del todo, para alzarla un tiempo aún por encima de su definitiva mudez y la descomposición en cualquier punto desconocido y subterráneo. Y del deber de mantenerla viva, a ella solamente, a la imaginada escena de su muerte en soledad, pasó a pensar en sí mismo, también como un inevitable deber a cumplir, como única forma de salvarse y perdurar sobre la noche y las noches y una interminable noche posterior, tibia, campesina, terrosa y vegetal, en paz bajo los pasos y la azada, extendido bajo la noche solamente con sus tenaces grillos, y el silencio sostenido sobre todo.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

So cortazariano

Vero dijo...

Bueno, por supuesto la música y especialmente el jazz están muy presentes en Cortázar, no solo como tema sino en la consecución de una cadencia de los significantes -lo que según Cohen con la reverberación de las ideas de Meschonnic soplando por sobre el hombro influye y hasta construye significado- pero él, Cortázar, lo "está tocando mañana", como dice Johnny, el de "El perseguidor", en este caso menos metafísico el asunto, porque Onetti escribe esto en el '43.

Broken Moon dijo...

Me encanta como describe la escena, de lo más lúgubre, pero puedo hasta imaginarla.

Vero dijo...

Me alegra, B.M., que te guste y la puedas ver y que te guste poder verla. Saludos.