domingo, julio 27, 2008
Brusca mente
Eslabones de un hombre aparte
Como iba diciendo
miércoles, julio 23, 2008
Los hombres libres
Segundo hombre libre. (Al primero.) La verdad te obliga a informar de que no tenemos rey y de que, por tanto, este edificio no puede ser su palacio. Para algo somos hombres libres.
Primer hombre libre. (Al segundo.) ¿Que la verdad me obliga? ¿Acaso no somos hombres libres, como bien dices? Siendo así, debemos desobedecer incluso a la verdad... Así es, señor extranjero. Ese edificio que veis ahí es el palacio del rey.
¡Cuernoempanza!
jueves, julio 17, 2008
Ever
y de las resacas y de las corrientes:
¡yo sé de la tarde, del alba exaltada como un pueblo de palomas,
y he visto alguna vez, eso que el hombre ha creído ver!
Mar salido de cauce
Anoche me di una vuelta por el Rojas. Arrastré a Nora, seduciéndola con la buena vida primero. Festival de poesía, salida al mar. Llegamos bien entrada la cosa (la tarde, la poesía). Oleaje cúspide en el santafesino Fernando Callero (me traje su Ramufo di Bihorp) en el primer trío que vi. En el segundo tramo visto y oído estuvo Montserrat Álvarez tan aplaudida como tímida. Encantadora, entonces y más todavía después. Me levanté hoy con un oxígeno nuevo. Vientos de Avalon, no sé si sentí o pensé. Por eso los castillos (y las espadas y escudos que no dije).
Camelot
domingo, julio 13, 2008
El séptimo día
miércoles, julio 09, 2008
Otra lección del maestro
—No su gloria, mi querido amigo —balbució el joven.
—No mi gloria... ¡lo que haya de ella! La verdadera gloria consiste en ... en haber sido puesto a prueba, haber tenido una pequeña calidad y haber ejercido un pequeño hechizo. Lo importante es haber conseguido que alguien se sintiera interesado. Ocurre que usted está loco, pero ello no afecta esta verdad.
—¡Usted es un gran triunfo! —dijo el doctor Hugh, imprimiéndole a su joven voz toda la vibración de unas campanas de boda.
Dencombe se quedó asimilándolo; luego hizo acopio de fuerzas para hablar otra vez:
—Una segunda oportunidad: ésa es la vana ilusión. Jamás ha habido más que una. Trabajamos a ciegas; hacemos lo que podemos; damos lo que tenemos. Nuestra duda es nuestra pasión y nuestra pasión es nuestra misión. Todo lo demás no es sino la demencia del arte.